sábado, 27 de noviembre de 2010

Un desconocido me regaló un libro

A veces llego a casa cabreada. Conmigo. Con el mundo. Con esta sociedad en la que vivo. No lo sé. Me cabreo porque me encuentro con alguien trepa y superficial en el trabajo. Con personas egoístas. Con otros que hacen daño gratuitamente. Con alguien al que he ofrecido mi cariño y mi amistad y me lo ha cambiado por desengaño y demás cosas que duelen.

Por suerte no pasa a menudo. Pero hay días en los que piensas que todo el mundo va a su puto rollo y es un egoísta de mierda. Que la gente se mueve por interés exclusivamente. Y te sientes la última idiota que piensa que la amistad es estar ahí siempre (sobretodo en lo malo), que el amor es disfrutar cuando tu ser querido es feliz, que sonreír no cuesta un euro y hace feliz a todo el que lo ve, que... cosas que no tengo claro si están bien o mal aprendidas. Si me tragué todos los cuentos edulcorados. Pero me gusta pensar que puede haber un mundo así.

Sinceramente puedo contar a mis amigos con los dedos de una mano. Como veréis no son muchos, pero son Amigos con mayúscula, de los buenos, de los que te escuchan en lugar de oírte, de los que comparten tardes contigo que cambiarías por días de vacaciones enteros. Como todos también he conocido los desengaños amorosos pero puedo decir sin ninguna duda que he encontrado al amor de mi vida, sólo él y yo sabemos lo bien que estamos juntos. Mi familia no es ejemplar ni mucho menos pero cuando pasa algo gordo hacen como las plaquetas de La Vida es Así y crean una piña para aliviar mis heridas. Así que quizá los cuentos que me contaron sí que existen después de todo, sólo que no todos tienen la suerte de vivirlos.

Durante la peor época de mi vida (de la cual me alegro haber pasado porque aprendí mucho) me ocurrió algo que rompió los esquemas. Como el sonidito ese que aparece en las pelis como si rayaran un disco y todo se paralizase. Estaba hecha una verdadera mierda por motivos que no vienen al caso, hasta el punto de no levantarme de la cama ¿para qué? pensaba yo entonces. Me pasaba el día como una zombi, bueno no voy a dar más detalles. Depresión nivel 10, ok? Imaginaros a mi madre, la pobre. Si habéis leído mi blog desde hace tiempo sabréis que mi madre y yo tenemos una relación dificililla porque somos muy diferentes pero nunca he puesto en duda que me quisiera (sólo que su manera de demostrarlo... bueno, eso es otro tema). Total que la pobre un día lo estaba comentando en el trabajo, que ya no sabía qué hacer conmigo, que se sentía impotente, que le dolía mucho verme así. Pues, poco después de comentarlo, ese mismo día después de la hora del desayuno un compañero con el que no tenía mucha confianza porque era un trabajador sustituto que un día está aquí y otro allí le regaló un libro para mí. El chico oyó lo que contaba mi madre y salío sin pensarlo a la tienda, eligió Déjame que te cuente de Jorge Bucay, me lo dedicó y se lo dio a mi madre para que me lo diera. Mi madre se quedó de piedra claro.

Cuando llegó a casa, yo estaba durmiendo (al medio día, para variar, dormía como 16 horas, una barbaridad!!). Total que me explicó que había estado comentando mi situación en el curro y antes de que me diera tiempo a echarle la bronca por airear mis intimidades con desconocidos me dio el libro. Yo también me quedé de piedra. Me chocó muchísimo el gesto y me puse a leerlo en seguida.



Creo que me lo leí en tres días y controlándome mucho, porque la verdad lo hubiera leído de una sentada, pero no es de esos libros. El libro en sí, para quien no lo conozca, es una recopilación de cuentos para adultos hilvanados a través de la historia de un chico que va al psicólogo y éste le cuenta los cuentos relacionado con sus inquietudes. Bueno, me cambió la vida, literalmente. Desde aquel momento me reactivé y empecé a hacer algo para cambiar mi situación. He de decir que aprendí muchísimo de los cuentos, de hecho se ha convertido en mi libro de cabecera y lo releo a menudo al azar. Es de esos libros que cada vez que los lees parece la primera vez porque dependiendo del momento de tu vida le das una lectura u otra.

Sin embargo, lo que me hizo salir de la cama no fue tanto el contenido del libro sino el gesto. El hecho de que un absoluto desconocido me regalara un libro y me lo dedicara me hizo recobrar la esperanza. Volví a creer en que el mundo no es tan malo. Todavía hay esperanza, todavía existen personas con buen corazón, personas altruístas de verdad, personas dispuestas a mejorar el mundo.

¿Alguna vez alguien o algo os ha cambiado la vida por completo? Para bien eh!

lunes, 22 de noviembre de 2010

¿Complejo de superwoman?

¿A veces tienes días que se te hacen eternos? ¿O días que desearías que tuvieran más horas porque no te da tiempo a acabarlo todo? Eso nos pasa a muchas. No quiero sonar feminista pero lamento decir que desde mi experiencia conozco a más supermujeres que superhombres. Las mujeres tenemos que rendir en todas las facetas: madre, hermana, amiga, trabajadora, hija, esposa, etc. Y eso sólo los roles principales, porque luego la mayoría vienen con sub-roles ¿cuántas de vosotras tenéis también que ser multifunción en el trabajo? Yo soy profesora -admito que me encanta- pero es agotador. Un profesor tiene que hacer de padre, amigo, psicólogo, actor, cómico, artista, administrativo, y mil más. Mi madre, sin ir más lejos, en su rol de madre y ama de casa hace de: economista, supervisora de compras, jefa de dirección, técnica reparadora, gabinete psicológico, etc de la familia. Eso prinpalmente por ser mujer (hay excepciones por supuesto). Lo digo porque la mayoría de hombres tienen dos funciones: trabajo y su tiempo libre. Y si tienes suerte igual se portan en casa o en la relación. Pero nada más. Mis amigas van todas de culo (como yo), es todo un acontecimiento intentar vernos todas a la vez, parece una cumbre a lo G20. Mis amigos en cambio, puedes llamarlos para tomar café cuando quieras que casi siempre están disponibles. ¿Se organizan mejor? NO. Tienen menos cosas que organizar.

Y ya para colmo si eres una persona hiperactiva, llena de ideas, proyectos y con ganas de aprender, mejorar y superarte a diario... eso ya es la élite. La élite no conoce el tiempo libre como tiempo de ocio sino como tiempo para aprovechar para hacer más cosas todavía. Sentarse en el sofá a ver una peli no es suficiente, hay que estar haciendo más cosas a la vez. Por ejemplo: ver una peli, que a su vez sea en versión original para repasar un poco el inglés, mientras tu gato se duerme en tu regazo y le mimas un poco y tú aprovechas de camino para coser. Ese fue mi plan de ayer por la tarde (domingo). Pero puedo rizar el rizo: estaba viendo la peli en el pc, sentada en mi cama, así que tenía el ratón al lado y mientras hacía todo eso iba descargando cosas. ¿Cómo lo hago? Práctica. Llevo desde que nací con una agenda diaria en la que no hay ni un espacio en blanco.

Hay días que ya no puedo más. Me canso. Me siento agotada física y/o mentalmente y me dan ganas de mandarlo todo a la mierda en un acto de rebeldía y no levantarme de la cama. Luego respiro hondo y pienso en algo muy concreto: tengo una tía que está soltera (cincuenta y tantos). Vive en un pueblo muy pequeño (menos de 200 habitantes) y tiene una paga por cierto grado de invalidez (nada que no le permita hacer una vida prácticamente normal). No trabaja, apenas sale de casa lo justo para ir a comprar y sólo mantiene contacto habitual con dos vecinas de su calle que para colmo no le caen muy bien. Cuando viene a visitarnos (ella tiene un piso aquí, en "la gran ciudad") se queja de que se siente muy sola. Nos pone verdes y multicolores porque no vamos a visitarla y no nos pasamos la tarde en su casa como hacíamos antes (nota: antes también venía mi abuela y por supuesto íbamos a verla porque la mujer no estaba para muchos trotes). Mi tía y yo siempre acabamos discutiendo por las mismas cosas: yo le comento que todos nos sentimos solos, que incluso cuando vives en una casa con más gente te sientes sola. Que hoy en día todo el mundo va a su bola principalmente porque trabajamos muchas horas y tenemos muchas responsabilidades, lo cual equivale a poco tiempo libre que destinamos principalmente a ducharnos y dormir. Ella no lo entiende. A mí también me cuesta entender que haya personas que carezcan de ilusiones, proyectos, metas, etc en la vida. No tiene ni parece que haya tenido ninguno nunca. Hasta hace unos años que vivía mi abuela todo iba bien porque vivía volcada en ella. Desde que falleció parece que no ha superado su muerte. Creo que lo que le pasa es que mi abuela era su única misión/ilusión en la vida. No ha sabido encontrar más.

Me parece muy triste. He intentado mostrarle mi punto de vista y animarla a que se apunte a cosas, que cultive aficiones, que conozca más gente. Se niega.

Puede sonar egoísta pero cuando tengo un día estresante y me planteo por qué hago tantas cosas me acuerdo de mi tía y otras personas parecidas que conozco y me doy cuenta de que hago tantas cosas porque tengo ilusiones, aspiraciones, me gusta aprender, me siento realizada haciéndolas y si tuviera el tipo de vida que tiene mi tía no sería feliz. Por mucho que me den ganas a veces de no tener nada que hacer. Sé que si no tuviera nada que hacer, sería una muerta en vida.


Un beso a todas las "superwomans" que día a día sobreviven y encima son capaces de esbozar una sonrisa y hacerlo con sentido del humor. ¡Ánimo!

miércoles, 17 de noviembre de 2010

¿A dónde viajais mentalmente?

Soy una persona muy mental. Para todo. Mi ex me solía decir que tenía un gran mundo interior. Lo único inteligente que dijo. La verdad es que para mí, mi cabeza es mi mejor amiga y mi peor enemiga (en inglés se llama frenemy, para que también sea un post educativo :P).

Pero esta vez quiero hablaros de la faceta buena. Cuando estoy cansada, depre, agobiada, etc, busco un momento de tranquilidad: cierro los ojos, me pongo los tapones en los oídos, me tumbo y relajo todo el cuerpo ¡y despego!

Viajo mentalmente. Busco un lugar en el que me apetezca estar en ese momento y desconecto. A menudo lo hago por las noches y me duermo en mitad del viaje. A veces me apetece irme a una playa de Cancún de las de folleto turístico

Uno de mis destinos mentales favoritos, sobretodo si piensas en sentir el calor del solecito sobre tu piel y de fondo las olas del mar. Ideal.

Sin embargo, mi destino viajero mental por excelencia es Nueva York. Concretamente Central Park. No sé qué tiene, es un sitio en el que no he estado pero siento que es mágico, que me encantaría estar.

En invierno:
Patinando:


En verano:

Hay un videoclip que no me canso de ver simplemente porque hay una pareja paseando por Central Park (espero que sea Central Park porque sino ya me vale...)



Me encanta viajar mentalmente. Ojalá un día supere el tema de los aviones y pueda ir de verdad, pero de momento y gracias a la tecnología puedo disfrutar de muchos sitios desde casa.

¿Y vosotros? ¿Viajais mentalmente? ¿A dónde os gusta ir?

lunes, 15 de noviembre de 2010

¿El invierno te puede? Quizá tengas TAE

Cuando los días empiezan a hacerse más cortos y hay menos horas de sol, normalmente a todos nos pasa que tenemos menos ganas de todo. Sin embargo, existe un pequeño porcentaje de la población al que esta falta de luz afecta de manera severa en su vida diaria. A medida que se va acortando el día sienten:

- Fatiga o cansanció físico
- Problemas para conciliar el sueño o incluso exceso de sueño durante el día (incluso habiendo dormido bien por la noche)
- Falta de ganas, motivación, interés por cualquier tipo de actividad
- Cierto grado de tristeza o angustía
- Cambios en el apetito con su consiguiente pérdida o aumento de peso

Y un medianamente largo etcétera.

A mí desde hace muchos años me pasa que en cuanto entra el otoño se me quitan las ganas de todo. Incluso cosas que antes me hacían ilusión y sé que me siguen gustando dejan de despertar interés en mí. Tengo sueño a todas horas, me siento pesada y fatigada sin motivo. Los caprichos en forma de dulce aumentan desmesuradamente y no tengo ganas de NADA.

Pues para los que estéis en la misma situación que sepáis que se trata de un tipo de trastorno llamado TAE (Trastorno Afectivo Estacional). Al parecer nuestro cerebro no lleva muy bien la falta de luz solar comparada con el verano y nos la juega creando un desequilibrio químico que se traduce en varios de los síntomas antes mencionados.

¿Qué si tiene tratamiento?

Pues sí y no. Al parecer en casos severos-severísimos pueden recetarte algún tipo de antidepresivo o una terapia a base de luz. Se ve que existen unas bombillas especiales que reproducen una luz similar a la solar y recomiendan una exposición de unos 30 minutos diarios o algo así he leído. Sin embargo, al tratarse de un trastorno estacional lo más recomendable es que cada uno lo lleve como pueda y sobretodo con mucha paciencia ya que a medida que se vayan alargando los días nuestro pesar irá menguando.

En pocas palabras: hay algunas personas que funcionamos a base de luz solar y cuando no hay pues funcionamos más bien poco. ¡Un asco!

Yo personalmente lo llevo fatal. Tanto mi trabajo como mis aficiones requieren de mi cabeza y mi concentración y mi interés en estos momentos son prácticamente nulas. Por suerte, trabajo por la mañana y al menos soy capaz de rendir en el trabajo pero digamos que después de comer sólo estoy físicamente porque mentalmente las neuronas se me ponen en huelga y me mustio como una flor.

Consejos que a mí me funcionan:

-Intenta aprovechar levantándote en cuanto salen los primeros rayos de luz y dejando las actividades más pesadas para las primeras horas del día.

-Procura reducir la ingesta de grasas y alimentos pesados (incluídos los dulces), inténtalo!

- Haz deporte. Esto es esencial. La verdad es que en cuanto haces deporte parece que la circulación reactiva el cerebro y las neuronas de guardia se activan. Sin embargo, reconozco que a pesar de ser una idea excelente precisamente lo jodido de este dichoso trastorno es que cuesta horrores despegar el culo del sofá, ponerse el chándal y sobretodo moverse. Hace falta toda tu fuerza de voluntad y la del que tienes al lado.

-Busca actividades que te encanten, tus actividades favoritas y prueba a empezar. A veces todo es empezar. Si aún así no hay manera, pues trata de hacer actividades que no requieran mucho esfuerzo mental, actividades más bien mecánicas.

-Cuando tengas que realizar alguna tarea -sobretodo por la tarde- intenta quedar con alguien para llevarla a cabo. Te será mucho más llevadero y te ayudará a desplazar esa especie de pereza que nos invade el cuerpo.

- Es normal que te sientas decaído y falto de ganas pero no te culpes. Igual que hay días que te levantas contento sin motivo también habrá días que estés triste también sin motivo. Yo, desde mi experiencia, por mucho que lo analizo todo veo que soy feliz y todo está bien. El problema es que aunque sé que soy feliz, no me siento feliz. Conclusión: el cerebro que es un tramposo, hay qu ser más listo --> no te culpes de cosas que no son culpa tuya.

- Piensa que cada día que pasa queda uno menos para que los días empiecen a ser cada vez más largos y productivos. Aprovecha las épocas de sol durante el año para rendir el doble que ahora. Y mientras tanto, relájate y disfruta de un poco de paz. Ya llegará el verano.

- Aunque no tengas ganas ponte música. Eso siempre anima. Ojo con la música que eliges (Alex Ubago por ejemplo prohibidísimo, no por gusto musical sino por sentido común con tus síntomas).

-Quizá es buena idea que comentes a tus seres queridos cuál es tu situación, más que nada para que no se preocupen pensando que estás deprimido. Digamos que lo estás pero no lo estás.

A todos los que os interese el tema: consultar con vuestro médico, buscar información en fuentes fiables, etc. Yo aquí digo las cosas basándome en mi experiencia, no en ningún estudio científico. Así que...

¡ánimo que ya queda menos para el veranito!

Justificar a ambos lados

sábado, 6 de noviembre de 2010

Down to Earth (again)

Casi 2 meses después. Aquí estoy. Volví a desaparecer. Dicen que el hombre tropieza dos veces con la misma piedra, pues yo no sé cuántas llevo ya. Os presento a una de las piedras que reaparecen en mi camino a menudo: olvidarme de mí. Forma parte de mi carácter extremista y cada vez menos obsesivo que por suerte ya va mejorando: cada vez que tengo un problema/asunto me centro tanto en él que pierdo el sentido del resto de las cosas.

¿A vosotros os pasa? A mí me pasa que me obsesiono con algún aspecto de mi vida y anulo por completo los demás. Me ocurrió durante años hasta que encontré el amor, estaba tan obsesionada con encontrarlo que no veía que había otras cosas en mi vida que también era importantes. Me pasa cuando me propongo empezar una dieta, sólo pienso en calorías gastadas y calorías consumidas. Me pasa cuando empiezo un trabajo, todo son proyectos por empezar. Por suerte voy variando, hay personas que se pasan años o toda una vida encalladas en uno de los aspectos. La típica amiga que siempre está hablando del mismo tema: los tíos, su madre, su novio, la moda, el curro, etc. Monotema. Le tienes cariño pero a veces raya.

Pues eso me pasa a mí, casi que me rayo sola. Esta última vez me ha dado por el trabajo de nuevo. Se me metió en la cabeza probar a preparme oposiciones. Resultado (3 semanas después): agotada física y mentalmente, estresada, a mi novio sólo le he visto porque me traía fotocopias, 2 kgs de más de pasarme todo el día en una silla, múltiples dolores musculares de la dichosa silla, principio de ansiedad y casi de locura. Al final he tenido que dejar de preparlas (muchos motivos, no hace falta pegar el rollo aquí). Simplemente, no es mi momento.

Ahora me siento libre. Es como si mis pulmones tuvieran más espacio para expandirse. Los músculos se han destensado. Ayer pasé una tarde de lujo con mi chico y he dormido bien. Todo lujos que se nos pasan por alto a menudo.

Todo eso me ha recordado un cuento, uno de esos que me encantan. No recuerdo los detalles pero en esencia...

Dicen que un exitoso hombre de negocios salió a pasear por la playa con su perro una mañana soleada de verano. A mitad del paseo oyó a su perro ladrar a una pequeña barquita de madera y se acercó por ver a qué venía tanto alboroto. Dentro de la barquita encontró a un pescador aproximadamente de la misma edad que él echando una siesta. El hombre se disculpó con el pescador por los ladridos de su perro, a lo que éste le restó importancia y ambos entablaron una pequeña conversación:

- ¿Usted también está de vacaciones? - preguntó el hombre de negocios.
- No. Yo trabajo todos los días del año, nunca tengo vacaciones - contestó el amable pescador.

- Pero hoy está usted aquí en la playa descansando y tomando el sol. Eso son vacaciones.
- No es así, lo que ocurre es que hoy ya he terminado mi jornada laboral y puedo descansar el resto del día.
- ¿Y no piensa aprovecharlo para trabajar más horas?
- ¿Para qué?- preguntó el pescador- Ya pescado lo suficiente para comer hoy.

- Pues hombre, para aumentar sus ganancias.

- ¿Y para qué? -contestó de nuevo el pescador.

- Para crear su propia empresa.

- ¿Y para qué?

-Pues para poder tener a sus propios trabajadores acumulando ganancias para usted y así usted podría pasarse el día descansando.

Tal y como dijo esta última frase el pescador sonrió y siguió durmiendo su siestecita y el exitoso hombre de negocios se dió cuenta de lo irónico de la situación.


Espero que os haya gustado. ¡Qué tengáis un buen día!

jueves, 2 de septiembre de 2010

Nos convienen los buenos pero nos ponen los malos

Diría que es una conversación recurrente entre amigos incluso en diferentes épocas de la vida. ¿Por qué las chicas nos fijamos en los tíos malos, cabrones, etc? Sabemos que nos convienen los buenos pero es que los buenos no nos ponen. Nos ponen los malos. A pesar de que nos hagan sufrir. Nos pone el típico chulito (el que lo hace bien, no el papanatas que intenta hacerse el chulo). ¿Por qué? Pues en mi opinión porque se muestran seguros de sí mismos. No representan ese chico-osito de peluche que en el fondo no es más que alguien a quien quieres cuidar. Él es el Hombre. Él se cuida por sí solo. Es más, incluso cuida de ti. No es que nos guste que cuiden de nosotras siempre pero está bien saber que si tienes un momento de flaqueza él estará ahí. Además nos gustan porque nos conquistan con los gestos, con la mirada, con su lenguaje corporal nos piropean. ¿Y por qué más? Pues yo creo- insisto, es mi opinión- que todos deseamos lo que no tenemos o lo que no podemos tener. Si eres rubia quieres ser morena, si eres morena quieres ser rubia, si tienes el pelo liso te gustaría rizado, si vives en una ciudad desearías vivir en un pueblo, etc. Y ellos se muestran inaccesibles, no están ahí para ti como muchos chicos que te muestran su amor y se quedan esperando en tu puerta. Tristemente cuando te dan algo no lo aprecias, lo que te gusta es conseguir las cosas por tí misma.

¿Y a qué viene esto? Es una reflexión que me ha venido a la cabeza al ver el nuevo vídeo de Aventura: El malo. Recuerdo que una vez en una conferencia de docentes un tío que era un crack y tenía mil años de experiencia nos dijo que con los estudiantes tirásemos de los clásicos, que lo que para nosotros era un tópico para ellos era nuevo, como lo fue para nosotros: alardear de las noches de fiesta, empezar a fumar, empezar a maquillarse, etc. No sé si me entendéis. Y es que el típico chulito nos ha puesto, nos pone y nos pondrá siempre. Sobretodo si tiene el cuerpazo y la voz sexy de Mario Casas. ¿Habéis visto el trailer de su próxima peli? Lo dejo aquí para ir abriendo boca. Toca esperar a que la estrenen el 3 de diciembre, pero siempre podéis leeros el libro, es de Federico Moccia :)


martes, 31 de agosto de 2010

Mi nuevo método para hacer ejercicio

La cinta de correr la pospongo porque de momento me ha surgido un nuevo método para hacer ejercicio. Lo trajo el domingo por la noche mi hermano y por mucho que me negué al principio ya me ha robado el corazón: se llama Suso.


Aunque mi hermana tiene una perra pequeña y vivió más de un año en casa con nosotros nunca he sido muy fan de los perros. Me pone nerviosa que me persigan todo el rato, que se pongan tristes y el olor a perro que desprenden (ni qué decir del olor a "perro mojado" cuando llueve). Yo soy absolutamente fanática de los gatos, ya sabéis que tengo dos y en el piso de mi tío -que vive debajo- hay otros dos. Pues bueno, este cachorro de 6 meses iba camino de la perrera y mi hermano decidió que como prácticamente somos una protectora pues para casa. Al principio me enfadé porque sabía que lo acabaría cuidando yo pero... me ha robado el corazón.

No tenía ni idea de que pasear con un perro iba a ser tan placentero. La primera vez que lo saqué lo hice por obligación por hacerle un favor a mi hermano y pensé en estar un cuarto de hora. Al final estuvimos más de 2 horas paseando y ni me di cuenta. Antes de ayer estaba un poco cabreada, triste y a la vez como con ansiedad y me fui con él. Vine nueva.

Salir a pasear nos sienta bien a los dos, no sé a quién mejor. Definitivamente con el ejercicio que estoy haciendo con él y la alegría que da cuando vas caminando y te mira como feliz, de momento la cinta de correr se queda en stand by.

sábado, 28 de agosto de 2010

Mi primer y único día en un gimnasio

Desde hace unos días se me ha metido en la cabeza comprarme una cinta de correr. Eso sí, para andar (rápido). He empezado a ponerme seria con el deporte y dejar de comer guarradas y sé que en cuanto vuelva al curro cualquier excusa será válida para posponer el ejercicio. Con el deporte me pasa igual que con la playa, cuando me pongo a ello me lo paso genial pero me da mucha pereza ponerme en marcha. Así que decidí elegir un deporte que supiera que no me daría pereza y que pudiera hacer en casa porque aunque nunca había ido a un gimnasio sabía que no era lo mío.

Me gusta hacer deporte sola por varias razones: inconscientemente compito con el que tenga al lado y lo paso mal, me gusta desconectar y odio que me den conversación mientras tanto, tener gente haciendo deporte a mi alrededor me desconcentra, etc. Así que desde hace años hago deporte en casa. Tengo una bici estática que me encanta (es de las que tiene respaldo) pero aburre siempre lo mismo. La elíptica he decidido venderla porque definitivamente no es lo mío; será cierto que trabaja todo los músculos del cuerpo porque cansa que no veas.

Volviendo al tema: decidí ir a un gimnasio para probar la dichosa cinta antes de volverme loca y comprármela en plan impulsivo. Así que mi novio y yo nos fuimos a un gimnasio de su ciudad. Elegimos uno que había estado yendo su hermano y que tampoco era de super lujo. La sala de fitness era una pista de fútbol sala llena de aparatos de fitness, bicis, cintas, etc y un trocito con un espejo para las clases. En cuanto me cambié de ropa me encontré a la monitora en el pasillo que me invitó efusivamente a unirme a la clase pero me dio no sé qué y aunque en casa hago vídeos de aeróbic y demás me dió corte y le dije que quizá luego, que era mi primer día. Me pareció muy maja, de esas chicas que te contagian la energía. Yo iba con un objetivo en mente: probar la cinta de correr. Nada más entrar me fui directa y empecé a darle a los botones y no hacía nada. Mi novio vino también y nada. He de decir que en total no había más de 10 personas en la sala de fitness por lo que empezaba a ser el centro de atención con tanto tocar botones y poner cara de 3567 entre 13. La monitora que estaba corriendo un poco en otra cinta se dio cuenta y a distancia empezó a gritarme:
Monitora: "tienes que darle al ON, el botón verde".
Yo, roja o más bien púrpura: "No, si ya... pero es que no va".
Ella "que sí mujer, tú dale al verde y al + y la cinta empieza a moverse".
Yo: "mmm es que no va..." (mi novio seguía toqueteando).

Al final se levantó un chico con una camiseta naranja que había al lado en una elíptica, tiró hacia arriba de un botón-palanca rojo que parecía hecho para avisar de que había un incendio y la cinta se puso en marcha. "Es que estaba bloqueada" le dijo directamente a la monitora. Yo al chico de naranja, tímidamente "gracias". Él--> sonrisa de "te he salvado eh" ¡y tanto que me salvó! sino todavía estaba allí tocando botones... En cuanto se puso en movimiento la monitora me dijo que la pusiera entre 5 y 6. Y en cuanto iba por 3 me sentía patosa e involuntariamente me iba hacia un lado así que me agarré a los cuernos de la cinta en plan lapa. Empecé a darle caña hasta el 5 que es un paso ligerito y pensé "no está tan mal". Iba a buen paso y cogida del todo porque eso sí, si me soltaba estaba segura de que me caería. La chica se acercó a ver cómo iba y le comenté que bien pero que me daba miedo soltarme y pegarme una galleta así que me dijo que no me soltara que ya llegaría un momento que me soltaría sin darme cuenta y que para ser el primer día hiciera 10 minutos, luego 10 de bici, etc.

Le hice caso y a los 10 minutos paré la cinta progresivamente y cuál fue mi sorpresa cuando me di cuenta de que llevaba un cebollón... no era dueña de mis pasos. Era como si tuviera vértigos, estuviera borracha, etc, quería andar recto y tenía la sensación de que me iba hacia el lado y me sentía mareada. De repente vi al de naranja sentado en un banco que no había dado cuenta de que estaba y me salvó de nuevo. Me miró y me sonrió y yo traté de mantener la mirada recta, secarme el sudor y rezar para mis adentros "por dios, que no me maree, que no me pase nada, que vergüenza". Fui al lavabo como pude a echarme agua y aunque me estaba meando no me atreví a cerrar la puerta por si me daba un yuyu, ya que seguía igual de mareada. Así que me aguanté y cuando salí y vi a mi novio corriendo en plan maratón en la cinta como si lo hiciera a diario me di cuenta de que no nos iríamos para casa tan pronto. Así que me senté en una bici estática con respaldo a ver si se me pasaba el mareo sentada.

En cuanto me senté me di cuenta de que me quedaba corta. Así que empecé a mirar rápidamente cómo narices se regulaba hasta que encontré una palanquita. Creo que tardé unos 2 minutos en adecuarla. Luego empecé a darle a los botones y no se encendía nada. Harta de ser la novata-gafe, deseé que nadie se diera cuenta y empecé a pedalear igualmente. Al rato un chavalín se sentó en la bici de al lado, reguló el sillín en 10segundos y en cuanto tocó la pantalla se iluminaron todos los botones y la configuró. Se dió cuenta de que la mía estaba parada y no dijo nada, la verdad es que casi se lo agradecí.

Después de 15 minutos de estática un pelín menos mareada y viendo que mi novio se había planteado llegar a Valencia corriendo decidí volver a la caminadora pero esta vez a caminar muy despacito. Me sentía mareada todavía pero prefería moverme a quedarme quieta y que se moviera todo a mi alrededor. Al final volví a darle más caña porque me sentía cómoda y pude hacer media horita más hasta que mi novió decidió dejar la carrera a la altura de Castellón calculo yo...

Me fui para la ducha con un cebollazo... lo cierto es que se me olvidó llevar agua y estoy acostumbrada a beber una media de 1 litro cuando hago ejercicio y creo que eso y el hecho de que me pareció que el sitio no tenía suficiente ventilación puede que fueran los causantes de mi castañazo. En cuanto me metí debajo de la ducha me sentí un poco mejor. Al salir saludé a la monitora que me contestó muy maja y me fui con mi novio intentando no pegarme contra ninguna pared en busca de azúcar. Jamás me ha sentado tan bien y he notado tan pronto las vitaminas de un zumo aunque no sea natural.

Estuvimos un rato sentados en un banco mientras nos daba el aire. Y para casa.

Hoy, casi 3 días después todavía tengo agujetas en la parte frontal de las piernas y al día siguiente me moría de hambre todo el rato. Así que lo que yo creía que era un "paseíto" se convirtió en una verdadera sesión de ejercicio cardiovascular.

Conclusiones acerca de la cinta de correr:

- Nunca me había cansado andando al aire libre por muy rápido que fuera pero lo cierto es que la maquina te obliga a no bajar el ritmo ni un segundo y eso se nota. Ejercitas más que al aire libre.

-Me gusta más caminar al aire libre por ver cosas, distraerte y que te de el aire literalmente. Sin embargo, sé que no lo voy a hacer como rutina de ejercicio porque no me gusta ir sola a caminar y en cuanto se hace de noche a las seis de la tarde ya no me gusta mucho salir a la calle.

- Cuando estuve en Decathlón me gustó mucho un modelo de máquina que se plegaba y no ocupaba nada de espacio pero creo que me acabaré comprando uno de esos mastodontes que ocupan más porque me he dado cuenta de que los cuernos de la máquina son muy importantes y la estabilidad así como la inclinación también.

- He averiguado preguntando en foros de fitness que lo del mareo es habitual al principio. De hecho, recuerdo que cuando me bajo de una cinta automática en el aeropuerto por ejemplo también me siento un poco torpe.

- Decisión: me compraré la cinta más adelante, en cuanto me recupere un poco económicamente. Creo que le sacaré bastante partido por mucho sitio que ocupe. La salud por encima de todo.

Conclusiones sobre ir al gimnasio:

- Si estás empezando a hacer ejercicio no te apuntes a un gimnasio porque la gente que va habitualmente ya está acostumbrada y tú sin darte cuenta te metes más caña de la que deberías intentando ponerte a su altura.

- Aunque los demás no me miren me siento observada igualmente. Es un acto reflejo. Cada vez que tropezaba en la dichosa máquina alguien se giraba.

- Normalmente la gente en los gimnasios es maja y amable. Gente sana. Aunque parezca que te miran en plan "mira que pardilla" en cuanto les preguntas te suelen ayudar muy amablemente. La gente suele ir a hacer deporte, no a burlarse de nadie.

- Me he dado cuenta de que casi todos los ejercicios que ofrecen las máquinas de los gimnasios (que me puedan interesar personalmente) los puedo hacer en casa con mis pesas o mis cintas elásticas.

- He confirmado que me encanta hacer deporte en casa y que efectivamente no soy carne de gimnasio.

Una recomendación si estás pensando en apuntarte a un gimnasio: quizá será mejor que pagues una entrada de un día o de un mes para comprobar si realmente te gusta a pagar un año entero y que no aparezcas por allí más.

jueves, 26 de agosto de 2010

Una página genial para reírte un rato

Hace un par de días estaba un poco decaída y mi novio me recomendó una página para reírme un rato. No le hice mucho caso porque no era el momento y él siempre está leyendo chistes y cosas chorras como hobby pero hoy me he puesto a mirarla y me he estado riendo un buen rato. La verdad es que engancha. Es una web que se llama Asco de vida donde la gente deja una breve anécdota que ha podido resultarles frustante en el momento pero de esas que luego te ríes. Para que os hagáis un ejemplo os dejo unas cuantas que me han hecho gracia particularmente:



Hoy, tomando un baño en la playa con los colegas, veo cerca de nosotros flotando una bolsita de plástico transparente. Quise ir en plan ecologista delante de mis amigos cogiendo la bolsa y diciendo "qué guarra es la gente joder". Este ADV lo estoy escribiendo con la mano izquierda, la derecha la tengo hinchada, ya que no era una bolsa, sino una medusa.









Es un vicio, te pones a leer y como son cortitos sigues leyendo y se te pasa el tiempo volando!! La verdad es que está gracioso para desconectar un rato :)

jueves, 19 de agosto de 2010

Por si te encuentras con algún gilipollas

Bueno, después de una entrada pesadita y negativilla aquí va una de las mejores perlas que he captado para mi colección de frases que te marcan. Es genial!!



No hay que olvidar que no se puede discutir con un gilipollas; te obligará a rebajarte a su nivel y además te ganará porque tiene mucha más experiencia.

Curso nuevo, nuevos propósitos

Va terminando agosto y se acerca el 1 de septiembre de forma inminente. Eso es para muchos profesores y alumnos como el 1 de enero para el resto de la sociedad: curso nuevo, vida nueva. Así que mi lista de propósitos para el nuevo año se reduce a dos (a ver si así los cumplo)
1. No dejar el deporte de lado
2. Combinar la vida profesional con la vida privada

No sé si podré cumplirlos, la verdad es que entre el tiempo que hace y mis circunstancias ando un poco desmotivada. El año pasado estuve trabajando de 8-21h de lunes a domigo de septiembre a mayo. No tuve ni un dichoso fin de semana, tarde o rato tranquilo para desconectar, disfrutar, etc. El poquito tiempo que tenía a veces lo empleaba en una ducha o una necesitada siestecita. Luego mayo y junio como sabéis que por fin me llamaron para trabajar en la pública pues el estrés y los nervios me comieron literalmente. Recuerdo que me compré ropa para mi cumple (el 6 de junio) y cuando acabó el mes me sobraban más de dos tallas de tejanos. Lo cual no me viene mal (perder un par de tallas) pero no así, no por nervios y dolor de estómago. Y sobretodo no para volver a recuperarlos en julio!

El plan que me espera ahora -laboralmente hablando- es una mierda. Nunca sabes cuándo te van a llamar ni por tanto tiempo. Hay muchos colectivos como los profesores (las enfermeras, por ejemplo). Te pasas el tiempo esperando a que te llamen y cruzando los dedos para que sea por mucho tiempo y no esté en el culo del mundo. Y lo que la mayoría de la gente que te rodea no entiende es que cualquier persona pasa nervios cuando entra en un trabajo nuevo, no? Imaginaros tener un trabajo nuevo cada semana o cada dos? Esos nervios te los comes igual.

Total que llevo un par de días rayadísima en un bucle interminable: me quedan 12 días para que vuelva a empezar todo y no sé si ponerme las pilas y darle caña repasando un poco de material o seguir en plan a la bartola no haciendo nada. Nunca en mi vida había tenido vacaciones hasta este año. Me refiero a vacaciones reales porque siempre he tenido que currar o estudiar o ambas a la vez en verano. Éste ha sido mi primer verano de vacaciones y lo he dedicado a no hacer nada más que ir a la playa y no pensar en nada. Mi mente echaba humo el curso pasado y está aterrorizada de que empiece éste nuevo. No sé si seguir así los días que me quedan (no dar un palo al agua) o hacer esas cosillas que tengo pendientes. Objetivamente pienso que debería hacerlas pero es que no tengo ganas, de nada. Lo de no pensar se ha convertido en algo extremo. Una de las cosas que quería hacer este verano también era postear más cosas y por no pensar no he puesto apenas nada.
No sé qué haré, lo que está claro es que el ser humano se acostumbra a todo y mientras menos haces, menos quieres hacer. De momento, no voy a pensar en ello.

¿Qué tal está resultando vuestro verano?

lunes, 16 de agosto de 2010

El título del blog

Desde que creé este blog más de una persona me ha escrito para preguntarme dónde hablo de las neurosis o por qué me considero neurótica. Bueno, pues hoy me apetece explicarlo aquí. Cierto es que si buscas en diccionarios como la RAE -entre otros- encontrarás la definición de neurótico como alguien que padece una enfermedad del sistema nervioso caracterizada por fuertes desequilibrios emocionales. Sin embargo, hay otras acepciones del término que no siempre recogen los diccionarios ya que se han ido creando a nivel popular. Por un lado, he oído a menudo tildar de "neurótico" a alguien que tiene muchas manías, puñetas, rutinas, llámalo x (no es mi caso). Y por otro lado, y aquí me incluyo yo, a veces uno utiliza el término neurótico para denotar que tiene muchas neuras. ¿Y qué es una neura en este contexto? Pues una neura en mi círculo de amistades es un miedo, un fantasma, una preocupación, algo que te ronda la cabeza continuamente, etc. Y de ahí viene el título de este blog. Para mí este no es más que un lugar donde exorciso mis fantasmas, cuento mis historias mentales, etc. Uno en un diario puede contar mil cosas, desde cómo le ha ido el día hasta lo que le ocupa la cabeza últimamente y éste no es más que mi diario virtual no un lugar de encuentro para enfermos de neurosis. Además, como muchos de vosotros ya sabéis, soy una persona que le da mucho al coco (demasiado a veces), exceso de imaginación, hiperactividad mental, etc. Así que es habitual que tenga un mayor número de neuras que la mayoría de mis amigos y parientes. Por ello lo titulé Diario de una Neurótica, porque suelo ser la neurótica por excelencia del grupo. Siento mucho la decepción que se lleva más de una persona que viene a buscar información, ayuda o lo que sea con el tema de las neurosis pero por otro lado, me alegro mucho de tener este lugar de liberación de fantasmas donde he tenido la suerte de conocer a gente estupenda que comparte mis paranoias o neuras o simplemente que me aporta otro punto de vista. A todos los que me leéis a menudo, gracias.

martes, 3 de agosto de 2010

Las series de médicos son unos de mis clicks

Me gusta ver series de hospitales de vez en cuando. He visto Hospital Central, Urgencias, Trauma, etc y no me he perdido ni un sólo capítulo de Anatomía de Grey. Cada serie tiene su cosa pero lo que me gusta de todas es que me da distancia, perspectiva sobre mi vida.

Me pasa a menudo que me "obsesiono" con algún aspecto de mi vida o algún problemilla que empiezo a convertir en problema, los típicos: el trabajo, el stress, la familia, los kilos de más, la amistad, la pareja, etc. A veces me preocupo más de la cuenta sin darme cuenta y este tipo de series me ofrecen la perspectiva que me gustaría tener a diario y olvido a los pocos días de retomarla. Se me olvida que sólo vivimos una vez, que nunca seremos más jóvenes de lo que lo somos en este instante, que a veces la mejor forma de hacer las cosas es haciéndolas (sin darle tantas vueltas), que uno se arrepiente más de lo que no hizo que de lo que se atrevió a hacer, que cuando te obsesionas con algo no aprecias el resto, ... se me olvida que la vida es un conjunto de cosas, de aspectos, la vida es la familia, el trabajo, la amistad, estar en forma, el amor, la paz interior, etc. La vida es un todo: sin lo malo no puede existir lo bueno. Pero con una condición: la salud.
Sin salud no hay vida, puede haber poca calidad de vida y en el peor de los casos acabar con ella. Por eso los temas de salud son los que realmente tienen derecho a quitarnos el sueño, los temas de salud importantes, no un resfriado que no te dejará estar al 100% en la reunión de trabajo en tu cita del sábado. Los temas de salud que amenazan tu vida o la de los que te rodean.

¿Básico, verdad?

Pues a menudo lo pierdo de vista. Por suerte o por desgracia he aprendido perfectamente la lección. Lo malo es que a menudo mi mente se convierte en una casa rodeada de niebla que no me deja ver el resto del paisaje, una niebla en forma de problemas que tienen solución aunque todavía no la haya encontrado y que hace que me pierda momentos que nunca recuperaré. Es como cuando te pasas años haciendo el mismo recorrido por una calle y un día viene alguien contigo y te dice lo bonitas que son fachadas y miras hacia arriba y te das cuenta de que es la primera vez que te fijas en ello a pesar de llevar años caminando por esa calle. ¿No os ha pasado que de repente tenéis a alguien de invitado en vuestra ciudad que os hace fijaros en algo por lo que habéis pasado la vista mil veces pero realmente no habíais visto? A mí me suele pasar, entonces yo también me siento una turista (un poco tonta por no haberme dado cuenta antes). Igual de tonta que cuando creo tener un "problemón" y me doy cuenta de que realmente tampoco es para tanto.

Pero me siento afortunada de tener mis propias armas, aunque sean en forma de serie de médicos, cualquier arma que active ese click en el cerebro que te haga ver las cosas con objetividad y perspectiva es válida. Por eso lo que más me gusta de series como Anatomía de Grey no es el rollo de líos entre médicos guapos y promiscuos





aunque una no es de piedra, y Eric Dane no tiene desperdicio ninguno.... -->






pero lo que más me gusta son las historias de los pacientes, esas historias que me dan la colleja que a veces necesito :)

¿Qué es lo que os hace click a vosotros cuando lo necesitáis?

viernes, 23 de julio de 2010

¿Cómo va vuestro verano?

Pensaba que en cuanto estuviera de vacaciones una de las cosas que más haría sería escribir en el blog. Claro que también pensaba que cuando estuviera de vacaciones realmente sentiría que son vacaciones. De momento todo lo contrario, estoy igual de estresada y agobiada que si estuviera todavía currando.


Tendría que haberme ido con mi chico y desaparecer juntos a un sitio como este...


Pero en lugar de eso nos hemos quedado en casa. La idea era buena: sus padres se han ido y los míos también y como yo vivo a unos 10min de la playa y tengo una terraza muy acogedora y una piscina que aunque pequeña hace su función en el edificio, pensábamos disfrutar juntos aquí. Además, no me veo capaz de dejar solos a mis gordos y confiar en que los cuide mi hermano:


Además que ahora a parte de mis gordos también tengo a los gordos de mi tío que vive en el piso de abajo y como le lié hace un año para que acogiera a una de estas monadas que nos encontramos en la calle y hace dos meses le volví a liar para que adoptara a una pequeñaja que le hiciera compañía pues... me ha tocado encargarme también de ellos en vacaciones (van 4)


Estoy encantadísima de cuidar de los cuatro, me lo paso genial con ellos y me miman mucho todos. Y que conste que además tengo que alimentar a una pareja de periquitos cantarines y a un par de tortugas de agua, no sé si alguna vez os he dicho que mi casa es como un zoo o una pajarería... en fin, lo que ocurre es que han pasado ya 21 días desde que terminé de currar y entre bichos, papeleos, recados y demás no he tenido todavía ni un rato para mí sola.

No creo que sea para tanto, tan sólo me gustaría un ratito de relax, de desconexión..


No sé cuál es vuestro concepto de vacaciones, hay gente que le gusta dedicarlas a

salir de fiesta

ir a la playa o estar con la familia

Mi concepto de vacaciones es aprovechar al máximo para

Comer sano y sentirme ligera y saludable

Hacer deporte y despejar la cabeza

Pero sobretodo para estar a solas conmigo misma y respirar, disfrutar de la paz interior, del cielo azul y de estar viva y sonreír


Así que a partir del lunes me pongo a ello, el lunes vacaciones reales ¡a por ellas!

¿Qué tal estáis vosotros? ¿Cómo os va el verano? ¿Qué os gusta hacer en vacaciones?

martes, 22 de junio de 2010

Trucos para ahorrar en la factura del teléfono

Aquí os paso unos truquillos que me pasaron por mail para ahorrar en la factura del teléfono. Desde luego, que injusto que pasen estas cosas y la mayoría de las veces ni nos enteremos!!

Mensajes de texto.


Sabías que cuando respondes un mensaje de texto y la otra persona tiene otra compañía de móvil estás pagando un sms más de cuatro veces más caro?

Pasa que cuando uno aprieta "RESP" desde el sms q te mandaron, estás usando el servidor (o sea la empresa) de tu remitente.
Entonces en vez de pagar 15 centimos pagas entre 52 y 58 cent.. La forma de que no te pase más esto es saber si tus contactos usan Movistar, Vodafone u Orange; si se corresponde con tu servidor no importa, pero si por ejemplo sois Vodafone y el otro Movistar pagas 52 cent. y no 15.


Lo que tenes que hacer es mandarle un MENSAJE NUEVOy NO RESPONDER DESDE EL QUE TE MANDARON.



Así siempre te sale 15 cent.
Es importante que esto se sepa, porque es una estafa a nivel mundial y nadie lo dice.



HAZLO CIRCULAR,

CON CCO..(COPIA OCULTA)



MUY INTERESANTE
Habrás visto anuncios en televisión y otros medios, de Telefónica y de otras compañías.
En concreto, el número de Telefónica es el
11888y llamar al mismo tiene un coste de 1 EURO por llamada.
Pues bien, la opinión pública debe saber que, por ley, Telefónica está obligada a dar ese mismo servicio a través del 11818 por sólo 0,35 euros, como lo daban antes en el 1003.
Naturalmente, se cuidan muy mucho de no publicitarlo.

Apunta: 11818 ( para memorizar : 1-18-18)
Tú mismo puedes comprobarlo llamando a ambos números y escuchando la grabación con el coste de llamada que dan al principio. Díselo a todo el mundo en tu empresa, haz pegatinas o lo que quieras.
Pero, sobre todo, divulga este mensaje.
Nota: Lo más curioso de todo es que el
11818 es gratuito si llamas desde una cabina telefónica. Si no, haced la prueba.

( Memorízalo así : 1-18-18)

¡ REENVIADLO PARA QUE NO SIGAN ESTAFANDO ¡

Noticias interesantes sobre los números 901 y los 902:
Con esta nota espero daros una buena noticia y, siguiendo unos pequeños pasos, os ahorrareis una 'pasta' en la factura telefónica.

Os voy a comentar algo interesante sobre llamadas a teléfonos que empiezan por
901y 902, que como sabréis, cada vez son más usuales y tu operador te facturá aparte, aunque tengas contratada una tarifa plana para llamadas a FIJOS nacionales (comprobadlo en tus facturas).





Item más :
La cifra indica el nivel de la tarifa.
Así un 9010xx xxx indica la tarifa más barata y ( apenas tiene unos céntimos de sobrecoste )
un 9019zz zzz indica la tarifa más alta. ( Que puede tener un sobrecoste de 3 € ó más )

Lo mismo sirve para un 901, 902, 903, 904, 905, 906, 907, 908, 909 etc,

801, 802, 803, 804, 805, 806,807, 808, 809etc.,

excepto para los que comienzan por 900que son números telefónicos de llamada gratuita.





Cualquier entidad que haya contratado una línea
901ó 902ha tenido que abonarse previamente a un número de teléfono normal, que habitualmente empieza por el código de la provincia, hasta completar9 dígitos y al cual se vincula el servicio 901ó 902Pues bien, tú puedes llamar al 901 xxx xxx ó 902 xxx xxx,que se te facturará aparte cada vez que llames, o bien marcas el teléfono vinculado, que te va a atender EXACTAMENTE igual que el otro, pero si tienes contratadas las llamadas locales, provinciales y nacionales gratis (tarifa plana), esta llamada NO se te facturará aparte.

LO HAS ENTENDIDO, ¿VERDAD?


Toma nota de esta dirección:
http://www.nomasnumeros900.com/ .
Una vez dentro, en la parte de abajo hay unos campos de enlaces, pincha en:
ADSL o LLAMAR GRATIS . Vete a la izquierda de la pantalla y pincha en el grupo al que esté vinculada la entidad a la que quieres llamar.

Verás que aparece el número
901 xxx xxx ó 902 xxx xxx al que quieres llamar y justo al lado te aparece el número vinculado... ¡que es el que tienes que marcar!Está más que probado, y funciona perfectamente.

Ahí van los teléfonos de algunas entidades 'importantes':

ADSL TELEFONICA
(902 357 000) 91 707 74 60
MERCADONA:
(902.350.200)963. 883328
EL CORTE INGLÉS:
(901.122.122)91..7243699
RENAULT:
(902.350.200)93.4883727
ING:
(901.105.115)91.6349222
LA CAIXA :
(902.334.334)93.4953998
UNICAJA:
(902.246.246)952.076263
BANC SANTANDER:
(902.242.424)91..7098520
CAJA MADRID:
(902..102.010)91.3349300
LÍNEA DIRECTA
902.321.321)91.8072000
MAPFRE: (902.136.524)91.5816300
ZURICH:
(902.330.533)93.2671020
TELE 2:
(902.998.877)800.760770
MOTOROLA:
(902.202.302)91.4138993

(INSISTO: en color rojo, ¡NO LLAMAR!)

ESPERO QUE OS SEA ÚTIL. No seais egoístas, reenviadlo, hará que se beneficien todos.

sábado, 19 de junio de 2010

Me echo de menos

Hace un par de días estaba leyendo el blog de Simplemente Yo y me sentí en total sintonía. Tengo muchas cosas en común con ella y lo de los "pequeños agobios" es algo recurrente en mi vida. La verdad es que a mí también me va bien llegar aquí y soltarlo. De hecho, cuando estoy muy agobiada, a parte de dar un paseo, darme una ducha o dormir un rato lo mejor que puedo hacer por mí es coger un papel y plasmarlo todo. Es como si hiciera un corta y pega de mi cabeza al papel.

Últimamente, yo también voy juntando pequeños agobios que me van devorando. Tanto que ha llegado un punto en que me he perdido entre tanto papel de "desahogo". Sé que estoy por ahí, pero a veces me tengo que buscar y sacarme a mí misma con pinzas y ponerme delante de todos los papeles.


Como sabéis este año he empezado a trabajar por fin en la pública (el sueño profesional de toda mi vida). He estado 5 semanas en un colegio de primaria con unos niños realmente conflictivos que a veces lograban acabar con tu paciencia. Pues bien, me cesaron porque se incorporó el titular y yo contenta de tener vacaciones por fin. Después de haber estado desde septiembre trabajando unas 10h/d de lunes a domingo estaba agotada y necesitaba vacaciones. Pues nada, yo ya había cambiado el chip trabajador por el chip veraniego y me llamaron de un instituto de secundaria. Me puse contenta -claro- porque no me esperaba entrar en secundaria tan pronto y además me vendría genial la puntuación y el sueldo claro. Pues ahí estoy desde el día 10, lo malo es que ya no hay estudiantes. La verdad es que no sé muy bien por qué me han llamado porque no hago casi nada en todo el día. Estoy cubriendo una baja por maternidad y la titular antes de irse ya lo dejó todo listo. Así que allí estoy yo todo el día sin hacer nada (leyendo un libro o vaciando unas encuestas que me han dado por darme algo) y los demás profes estresados de un lado para otro. La verdad es que estoy apreniendo bastante de cómo funcionand algunas cosas en las reuniones que tengo que asistir pero me siento mal porque voy perdida en todo. Me han dado un calendario lleno de reuniones y demás que está como cifrado, ejemplo: "Reunión de PMS". Imaginaros, ¿qué ocurre? pues que no me queda otra que preguntar por supuesto. ¿Y que pasa cuando preguntas? Pues que la gente maja que te responde no suele tener ni idea, sólo saben de lo suyo y no se preocupan de lo que pueda ser lo demás con lo que me quedo igual. Y la gente que finalmente me aclara las cosas -los que saben- suelen contestarme de muy mala gana, vamos que les molestan las nuevas. Como si ellos nunca hubieran sido nuevos. La verdad es que a veces me dan ganas de sentarme en el sofá de la sala de profes a leer toda la mañana y cuando suene el timbre a mi casa y que me paguen igual porque cada vez que pregunto si puedo ayudar o no hace falta o te responden en otras palabras "qué quieres ahora? no ves que estoy muy ocupado/a?".

Total, ¿qué voy a hacer? Pues cambiar el chip. Para empezar cogerme un par de libros de ejercicios de inglés que quería hacer este verano y ponerme las pilas allí (el que me necesite que me busque). ¿Y que más? Pues intentar no centrar toda mi vida en el ámbito laboral. Estoy agobiada porque no tengo tiempo para mí, para mis otros ámbitos. Llevo todo el año volcada al 110% en el trabajo y ni me acuerdo de mí. Me ducho a toda prisa, veo a mi novio porque de paso me echa una mano en unos recados, y me paso todo mi tiempo libre preparando cosas para mi tiempo laboral. Así no se puede. Pero lo triste es que me esto le pasa a mucha gente. Se obsesiona con la vida amorosa, laboral, la dieta, la familia, etc. Y se olvida de que la vida es una mezcla de TODO.

Así que a partir de ahora sólo pensaré en el trabajo en mi horario laboral y por las tardes a otra cosa mariposa. Voy a aprovechar para hacer todas esas cosas que he ido acumulando el resto del año que siempre digo "ya las haré en verano" (como ordenar el armario, que he pasado de la fase tetris a la fase abro-tiro algo corriendo- y cierro más rápido todavía para que no se caiga al suelo). Aprovecharé lo que queda de junio para eso y a partir de julio ya lo pensaré. Por un lado quería hacer unos cursillos pero... primero unas vacaciones de rascarse la barriga en la playa y luego ya veremos.




¿Qué planes de verano tenéis vosotros?