martes, 31 de agosto de 2010

Mi nuevo método para hacer ejercicio

La cinta de correr la pospongo porque de momento me ha surgido un nuevo método para hacer ejercicio. Lo trajo el domingo por la noche mi hermano y por mucho que me negué al principio ya me ha robado el corazón: se llama Suso.


Aunque mi hermana tiene una perra pequeña y vivió más de un año en casa con nosotros nunca he sido muy fan de los perros. Me pone nerviosa que me persigan todo el rato, que se pongan tristes y el olor a perro que desprenden (ni qué decir del olor a "perro mojado" cuando llueve). Yo soy absolutamente fanática de los gatos, ya sabéis que tengo dos y en el piso de mi tío -que vive debajo- hay otros dos. Pues bueno, este cachorro de 6 meses iba camino de la perrera y mi hermano decidió que como prácticamente somos una protectora pues para casa. Al principio me enfadé porque sabía que lo acabaría cuidando yo pero... me ha robado el corazón.

No tenía ni idea de que pasear con un perro iba a ser tan placentero. La primera vez que lo saqué lo hice por obligación por hacerle un favor a mi hermano y pensé en estar un cuarto de hora. Al final estuvimos más de 2 horas paseando y ni me di cuenta. Antes de ayer estaba un poco cabreada, triste y a la vez como con ansiedad y me fui con él. Vine nueva.

Salir a pasear nos sienta bien a los dos, no sé a quién mejor. Definitivamente con el ejercicio que estoy haciendo con él y la alegría que da cuando vas caminando y te mira como feliz, de momento la cinta de correr se queda en stand by.

sábado, 28 de agosto de 2010

Mi primer y único día en un gimnasio

Desde hace unos días se me ha metido en la cabeza comprarme una cinta de correr. Eso sí, para andar (rápido). He empezado a ponerme seria con el deporte y dejar de comer guarradas y sé que en cuanto vuelva al curro cualquier excusa será válida para posponer el ejercicio. Con el deporte me pasa igual que con la playa, cuando me pongo a ello me lo paso genial pero me da mucha pereza ponerme en marcha. Así que decidí elegir un deporte que supiera que no me daría pereza y que pudiera hacer en casa porque aunque nunca había ido a un gimnasio sabía que no era lo mío.

Me gusta hacer deporte sola por varias razones: inconscientemente compito con el que tenga al lado y lo paso mal, me gusta desconectar y odio que me den conversación mientras tanto, tener gente haciendo deporte a mi alrededor me desconcentra, etc. Así que desde hace años hago deporte en casa. Tengo una bici estática que me encanta (es de las que tiene respaldo) pero aburre siempre lo mismo. La elíptica he decidido venderla porque definitivamente no es lo mío; será cierto que trabaja todo los músculos del cuerpo porque cansa que no veas.

Volviendo al tema: decidí ir a un gimnasio para probar la dichosa cinta antes de volverme loca y comprármela en plan impulsivo. Así que mi novio y yo nos fuimos a un gimnasio de su ciudad. Elegimos uno que había estado yendo su hermano y que tampoco era de super lujo. La sala de fitness era una pista de fútbol sala llena de aparatos de fitness, bicis, cintas, etc y un trocito con un espejo para las clases. En cuanto me cambié de ropa me encontré a la monitora en el pasillo que me invitó efusivamente a unirme a la clase pero me dio no sé qué y aunque en casa hago vídeos de aeróbic y demás me dió corte y le dije que quizá luego, que era mi primer día. Me pareció muy maja, de esas chicas que te contagian la energía. Yo iba con un objetivo en mente: probar la cinta de correr. Nada más entrar me fui directa y empecé a darle a los botones y no hacía nada. Mi novio vino también y nada. He de decir que en total no había más de 10 personas en la sala de fitness por lo que empezaba a ser el centro de atención con tanto tocar botones y poner cara de 3567 entre 13. La monitora que estaba corriendo un poco en otra cinta se dio cuenta y a distancia empezó a gritarme:
Monitora: "tienes que darle al ON, el botón verde".
Yo, roja o más bien púrpura: "No, si ya... pero es que no va".
Ella "que sí mujer, tú dale al verde y al + y la cinta empieza a moverse".
Yo: "mmm es que no va..." (mi novio seguía toqueteando).

Al final se levantó un chico con una camiseta naranja que había al lado en una elíptica, tiró hacia arriba de un botón-palanca rojo que parecía hecho para avisar de que había un incendio y la cinta se puso en marcha. "Es que estaba bloqueada" le dijo directamente a la monitora. Yo al chico de naranja, tímidamente "gracias". Él--> sonrisa de "te he salvado eh" ¡y tanto que me salvó! sino todavía estaba allí tocando botones... En cuanto se puso en movimiento la monitora me dijo que la pusiera entre 5 y 6. Y en cuanto iba por 3 me sentía patosa e involuntariamente me iba hacia un lado así que me agarré a los cuernos de la cinta en plan lapa. Empecé a darle caña hasta el 5 que es un paso ligerito y pensé "no está tan mal". Iba a buen paso y cogida del todo porque eso sí, si me soltaba estaba segura de que me caería. La chica se acercó a ver cómo iba y le comenté que bien pero que me daba miedo soltarme y pegarme una galleta así que me dijo que no me soltara que ya llegaría un momento que me soltaría sin darme cuenta y que para ser el primer día hiciera 10 minutos, luego 10 de bici, etc.

Le hice caso y a los 10 minutos paré la cinta progresivamente y cuál fue mi sorpresa cuando me di cuenta de que llevaba un cebollón... no era dueña de mis pasos. Era como si tuviera vértigos, estuviera borracha, etc, quería andar recto y tenía la sensación de que me iba hacia el lado y me sentía mareada. De repente vi al de naranja sentado en un banco que no había dado cuenta de que estaba y me salvó de nuevo. Me miró y me sonrió y yo traté de mantener la mirada recta, secarme el sudor y rezar para mis adentros "por dios, que no me maree, que no me pase nada, que vergüenza". Fui al lavabo como pude a echarme agua y aunque me estaba meando no me atreví a cerrar la puerta por si me daba un yuyu, ya que seguía igual de mareada. Así que me aguanté y cuando salí y vi a mi novio corriendo en plan maratón en la cinta como si lo hiciera a diario me di cuenta de que no nos iríamos para casa tan pronto. Así que me senté en una bici estática con respaldo a ver si se me pasaba el mareo sentada.

En cuanto me senté me di cuenta de que me quedaba corta. Así que empecé a mirar rápidamente cómo narices se regulaba hasta que encontré una palanquita. Creo que tardé unos 2 minutos en adecuarla. Luego empecé a darle a los botones y no se encendía nada. Harta de ser la novata-gafe, deseé que nadie se diera cuenta y empecé a pedalear igualmente. Al rato un chavalín se sentó en la bici de al lado, reguló el sillín en 10segundos y en cuanto tocó la pantalla se iluminaron todos los botones y la configuró. Se dió cuenta de que la mía estaba parada y no dijo nada, la verdad es que casi se lo agradecí.

Después de 15 minutos de estática un pelín menos mareada y viendo que mi novio se había planteado llegar a Valencia corriendo decidí volver a la caminadora pero esta vez a caminar muy despacito. Me sentía mareada todavía pero prefería moverme a quedarme quieta y que se moviera todo a mi alrededor. Al final volví a darle más caña porque me sentía cómoda y pude hacer media horita más hasta que mi novió decidió dejar la carrera a la altura de Castellón calculo yo...

Me fui para la ducha con un cebollazo... lo cierto es que se me olvidó llevar agua y estoy acostumbrada a beber una media de 1 litro cuando hago ejercicio y creo que eso y el hecho de que me pareció que el sitio no tenía suficiente ventilación puede que fueran los causantes de mi castañazo. En cuanto me metí debajo de la ducha me sentí un poco mejor. Al salir saludé a la monitora que me contestó muy maja y me fui con mi novio intentando no pegarme contra ninguna pared en busca de azúcar. Jamás me ha sentado tan bien y he notado tan pronto las vitaminas de un zumo aunque no sea natural.

Estuvimos un rato sentados en un banco mientras nos daba el aire. Y para casa.

Hoy, casi 3 días después todavía tengo agujetas en la parte frontal de las piernas y al día siguiente me moría de hambre todo el rato. Así que lo que yo creía que era un "paseíto" se convirtió en una verdadera sesión de ejercicio cardiovascular.

Conclusiones acerca de la cinta de correr:

- Nunca me había cansado andando al aire libre por muy rápido que fuera pero lo cierto es que la maquina te obliga a no bajar el ritmo ni un segundo y eso se nota. Ejercitas más que al aire libre.

-Me gusta más caminar al aire libre por ver cosas, distraerte y que te de el aire literalmente. Sin embargo, sé que no lo voy a hacer como rutina de ejercicio porque no me gusta ir sola a caminar y en cuanto se hace de noche a las seis de la tarde ya no me gusta mucho salir a la calle.

- Cuando estuve en Decathlón me gustó mucho un modelo de máquina que se plegaba y no ocupaba nada de espacio pero creo que me acabaré comprando uno de esos mastodontes que ocupan más porque me he dado cuenta de que los cuernos de la máquina son muy importantes y la estabilidad así como la inclinación también.

- He averiguado preguntando en foros de fitness que lo del mareo es habitual al principio. De hecho, recuerdo que cuando me bajo de una cinta automática en el aeropuerto por ejemplo también me siento un poco torpe.

- Decisión: me compraré la cinta más adelante, en cuanto me recupere un poco económicamente. Creo que le sacaré bastante partido por mucho sitio que ocupe. La salud por encima de todo.

Conclusiones sobre ir al gimnasio:

- Si estás empezando a hacer ejercicio no te apuntes a un gimnasio porque la gente que va habitualmente ya está acostumbrada y tú sin darte cuenta te metes más caña de la que deberías intentando ponerte a su altura.

- Aunque los demás no me miren me siento observada igualmente. Es un acto reflejo. Cada vez que tropezaba en la dichosa máquina alguien se giraba.

- Normalmente la gente en los gimnasios es maja y amable. Gente sana. Aunque parezca que te miran en plan "mira que pardilla" en cuanto les preguntas te suelen ayudar muy amablemente. La gente suele ir a hacer deporte, no a burlarse de nadie.

- Me he dado cuenta de que casi todos los ejercicios que ofrecen las máquinas de los gimnasios (que me puedan interesar personalmente) los puedo hacer en casa con mis pesas o mis cintas elásticas.

- He confirmado que me encanta hacer deporte en casa y que efectivamente no soy carne de gimnasio.

Una recomendación si estás pensando en apuntarte a un gimnasio: quizá será mejor que pagues una entrada de un día o de un mes para comprobar si realmente te gusta a pagar un año entero y que no aparezcas por allí más.

jueves, 26 de agosto de 2010

Una página genial para reírte un rato

Hace un par de días estaba un poco decaída y mi novio me recomendó una página para reírme un rato. No le hice mucho caso porque no era el momento y él siempre está leyendo chistes y cosas chorras como hobby pero hoy me he puesto a mirarla y me he estado riendo un buen rato. La verdad es que engancha. Es una web que se llama Asco de vida donde la gente deja una breve anécdota que ha podido resultarles frustante en el momento pero de esas que luego te ríes. Para que os hagáis un ejemplo os dejo unas cuantas que me han hecho gracia particularmente:



Hoy, tomando un baño en la playa con los colegas, veo cerca de nosotros flotando una bolsita de plástico transparente. Quise ir en plan ecologista delante de mis amigos cogiendo la bolsa y diciendo "qué guarra es la gente joder". Este ADV lo estoy escribiendo con la mano izquierda, la derecha la tengo hinchada, ya que no era una bolsa, sino una medusa.









Es un vicio, te pones a leer y como son cortitos sigues leyendo y se te pasa el tiempo volando!! La verdad es que está gracioso para desconectar un rato :)

jueves, 19 de agosto de 2010

Por si te encuentras con algún gilipollas

Bueno, después de una entrada pesadita y negativilla aquí va una de las mejores perlas que he captado para mi colección de frases que te marcan. Es genial!!



No hay que olvidar que no se puede discutir con un gilipollas; te obligará a rebajarte a su nivel y además te ganará porque tiene mucha más experiencia.

Curso nuevo, nuevos propósitos

Va terminando agosto y se acerca el 1 de septiembre de forma inminente. Eso es para muchos profesores y alumnos como el 1 de enero para el resto de la sociedad: curso nuevo, vida nueva. Así que mi lista de propósitos para el nuevo año se reduce a dos (a ver si así los cumplo)
1. No dejar el deporte de lado
2. Combinar la vida profesional con la vida privada

No sé si podré cumplirlos, la verdad es que entre el tiempo que hace y mis circunstancias ando un poco desmotivada. El año pasado estuve trabajando de 8-21h de lunes a domigo de septiembre a mayo. No tuve ni un dichoso fin de semana, tarde o rato tranquilo para desconectar, disfrutar, etc. El poquito tiempo que tenía a veces lo empleaba en una ducha o una necesitada siestecita. Luego mayo y junio como sabéis que por fin me llamaron para trabajar en la pública pues el estrés y los nervios me comieron literalmente. Recuerdo que me compré ropa para mi cumple (el 6 de junio) y cuando acabó el mes me sobraban más de dos tallas de tejanos. Lo cual no me viene mal (perder un par de tallas) pero no así, no por nervios y dolor de estómago. Y sobretodo no para volver a recuperarlos en julio!

El plan que me espera ahora -laboralmente hablando- es una mierda. Nunca sabes cuándo te van a llamar ni por tanto tiempo. Hay muchos colectivos como los profesores (las enfermeras, por ejemplo). Te pasas el tiempo esperando a que te llamen y cruzando los dedos para que sea por mucho tiempo y no esté en el culo del mundo. Y lo que la mayoría de la gente que te rodea no entiende es que cualquier persona pasa nervios cuando entra en un trabajo nuevo, no? Imaginaros tener un trabajo nuevo cada semana o cada dos? Esos nervios te los comes igual.

Total que llevo un par de días rayadísima en un bucle interminable: me quedan 12 días para que vuelva a empezar todo y no sé si ponerme las pilas y darle caña repasando un poco de material o seguir en plan a la bartola no haciendo nada. Nunca en mi vida había tenido vacaciones hasta este año. Me refiero a vacaciones reales porque siempre he tenido que currar o estudiar o ambas a la vez en verano. Éste ha sido mi primer verano de vacaciones y lo he dedicado a no hacer nada más que ir a la playa y no pensar en nada. Mi mente echaba humo el curso pasado y está aterrorizada de que empiece éste nuevo. No sé si seguir así los días que me quedan (no dar un palo al agua) o hacer esas cosillas que tengo pendientes. Objetivamente pienso que debería hacerlas pero es que no tengo ganas, de nada. Lo de no pensar se ha convertido en algo extremo. Una de las cosas que quería hacer este verano también era postear más cosas y por no pensar no he puesto apenas nada.
No sé qué haré, lo que está claro es que el ser humano se acostumbra a todo y mientras menos haces, menos quieres hacer. De momento, no voy a pensar en ello.

¿Qué tal está resultando vuestro verano?

lunes, 16 de agosto de 2010

El título del blog

Desde que creé este blog más de una persona me ha escrito para preguntarme dónde hablo de las neurosis o por qué me considero neurótica. Bueno, pues hoy me apetece explicarlo aquí. Cierto es que si buscas en diccionarios como la RAE -entre otros- encontrarás la definición de neurótico como alguien que padece una enfermedad del sistema nervioso caracterizada por fuertes desequilibrios emocionales. Sin embargo, hay otras acepciones del término que no siempre recogen los diccionarios ya que se han ido creando a nivel popular. Por un lado, he oído a menudo tildar de "neurótico" a alguien que tiene muchas manías, puñetas, rutinas, llámalo x (no es mi caso). Y por otro lado, y aquí me incluyo yo, a veces uno utiliza el término neurótico para denotar que tiene muchas neuras. ¿Y qué es una neura en este contexto? Pues una neura en mi círculo de amistades es un miedo, un fantasma, una preocupación, algo que te ronda la cabeza continuamente, etc. Y de ahí viene el título de este blog. Para mí este no es más que un lugar donde exorciso mis fantasmas, cuento mis historias mentales, etc. Uno en un diario puede contar mil cosas, desde cómo le ha ido el día hasta lo que le ocupa la cabeza últimamente y éste no es más que mi diario virtual no un lugar de encuentro para enfermos de neurosis. Además, como muchos de vosotros ya sabéis, soy una persona que le da mucho al coco (demasiado a veces), exceso de imaginación, hiperactividad mental, etc. Así que es habitual que tenga un mayor número de neuras que la mayoría de mis amigos y parientes. Por ello lo titulé Diario de una Neurótica, porque suelo ser la neurótica por excelencia del grupo. Siento mucho la decepción que se lleva más de una persona que viene a buscar información, ayuda o lo que sea con el tema de las neurosis pero por otro lado, me alegro mucho de tener este lugar de liberación de fantasmas donde he tenido la suerte de conocer a gente estupenda que comparte mis paranoias o neuras o simplemente que me aporta otro punto de vista. A todos los que me leéis a menudo, gracias.

martes, 3 de agosto de 2010

Las series de médicos son unos de mis clicks

Me gusta ver series de hospitales de vez en cuando. He visto Hospital Central, Urgencias, Trauma, etc y no me he perdido ni un sólo capítulo de Anatomía de Grey. Cada serie tiene su cosa pero lo que me gusta de todas es que me da distancia, perspectiva sobre mi vida.

Me pasa a menudo que me "obsesiono" con algún aspecto de mi vida o algún problemilla que empiezo a convertir en problema, los típicos: el trabajo, el stress, la familia, los kilos de más, la amistad, la pareja, etc. A veces me preocupo más de la cuenta sin darme cuenta y este tipo de series me ofrecen la perspectiva que me gustaría tener a diario y olvido a los pocos días de retomarla. Se me olvida que sólo vivimos una vez, que nunca seremos más jóvenes de lo que lo somos en este instante, que a veces la mejor forma de hacer las cosas es haciéndolas (sin darle tantas vueltas), que uno se arrepiente más de lo que no hizo que de lo que se atrevió a hacer, que cuando te obsesionas con algo no aprecias el resto, ... se me olvida que la vida es un conjunto de cosas, de aspectos, la vida es la familia, el trabajo, la amistad, estar en forma, el amor, la paz interior, etc. La vida es un todo: sin lo malo no puede existir lo bueno. Pero con una condición: la salud.
Sin salud no hay vida, puede haber poca calidad de vida y en el peor de los casos acabar con ella. Por eso los temas de salud son los que realmente tienen derecho a quitarnos el sueño, los temas de salud importantes, no un resfriado que no te dejará estar al 100% en la reunión de trabajo en tu cita del sábado. Los temas de salud que amenazan tu vida o la de los que te rodean.

¿Básico, verdad?

Pues a menudo lo pierdo de vista. Por suerte o por desgracia he aprendido perfectamente la lección. Lo malo es que a menudo mi mente se convierte en una casa rodeada de niebla que no me deja ver el resto del paisaje, una niebla en forma de problemas que tienen solución aunque todavía no la haya encontrado y que hace que me pierda momentos que nunca recuperaré. Es como cuando te pasas años haciendo el mismo recorrido por una calle y un día viene alguien contigo y te dice lo bonitas que son fachadas y miras hacia arriba y te das cuenta de que es la primera vez que te fijas en ello a pesar de llevar años caminando por esa calle. ¿No os ha pasado que de repente tenéis a alguien de invitado en vuestra ciudad que os hace fijaros en algo por lo que habéis pasado la vista mil veces pero realmente no habíais visto? A mí me suele pasar, entonces yo también me siento una turista (un poco tonta por no haberme dado cuenta antes). Igual de tonta que cuando creo tener un "problemón" y me doy cuenta de que realmente tampoco es para tanto.

Pero me siento afortunada de tener mis propias armas, aunque sean en forma de serie de médicos, cualquier arma que active ese click en el cerebro que te haga ver las cosas con objetividad y perspectiva es válida. Por eso lo que más me gusta de series como Anatomía de Grey no es el rollo de líos entre médicos guapos y promiscuos





aunque una no es de piedra, y Eric Dane no tiene desperdicio ninguno.... -->






pero lo que más me gusta son las historias de los pacientes, esas historias que me dan la colleja que a veces necesito :)

¿Qué es lo que os hace click a vosotros cuando lo necesitáis?