lunes, 14 de julio de 2008

Número privado

Si hay algo que odio en cuestiones relacionadas con el mundo de la telefonía es el tema de los números privados. Ellos saben a dónde llaman pero tú tienes que aceptar llamadas anónimas. Cierto es que algunos hospitales y otras entidades -por decirlo de alguna manera- también llaman bajo número oculto, pero estas llamadas no son muy frecuentes. Lo habitual es que te llame un comercial (que cada vez le echan más morro al asunto) y te acribille a preguntas a cualquier hora del día. Que si te pillan en el momento de la siesta que estás bajo de reflejos te lías sin darte cuenta a contestar a sus preguntas como si fuera una amiga haciéndote un test de una revista. Además últimamente las llamadas son cada vez más frecuentes debido al alto nivel de competitividad que existe entre las empresas y a la nueva creación de las mismas. Parece que todo esto unido a un protocólo cada vez más agresivo y con mayor falta de educación es lo que está propiciando mayores cabreos a los usuarios (al menos a los que me rodean, vamos). El tema es que antes te llamaba Fulanito Menganitez de la empresa Talycual que se interesaba por tu bienestar y muy amablemente te explicaba las ofertas tan generosas con las que su compañía quería premiarte por tu incorporación como cliente o por tu fidelidad después de tantos años a su lado. Pero es que ahora, sin embargo, te llama un tío/a que no te dice quién es ni de dónde llama y que directamente nada más descolgar el auricular te suelta preguntas como: “¿Cuánto paga de teléfono?”, “¿Usted es cliente de telefónica verdad?”, “¿Qué operador tiene contratado para su teléfono móvil?”. Sí, sí, en mi casa por lo menos el tema va así y casi siempre son comerciales de temas de telefonía los que se pasan tres pueblos. O sino directamente te sueltan la promoción que tienen ellos, a veces sin decirte la compañía desde que la llaman, y luego te preguntan que cuánto pagas tú y claro si les dices que pagas más pues ya la tienes liada y si les dices que pagas menos pues encima te acusan de mentiroso “porque ellos siempre tienen todos los datos en su pedazo de base de datos”. Que una vez uno me tocó tanto las narices presumiendo de base de datos que le acabé diciendo que si tenía tantos datos míos en su gran base por qué me tenía que preguntar el nombre cuando llamaba. Y es que a mí me ponen de muy mala leche. Además, que no sé porque ocultan el número, es como si te picara a la puerta un comercial con pasamontañas, vaya imagen que muestran de la empresa. Entiendo que se trata de un trabajo y que todo el mundo tiene que ganarse el pan de alguna manera pero para mí eso no es excusa para ser maleducado y agresivo llamando a una casa con número oculto y haciéndote perder el tiempo. Así que empecé a probar todo tipo de técnicas para deshacerme de ellos: primero –como hacemos todos- empecé con el “no me interesa gracias”, luego pasé al “no estoy interesada, gracias por su llamada” y colgaba, luego les decía que ya tenía contratado ese servicio con ellos, después les decía que estaba esperando una llamada y que no podía mantener ocupada la línea y ahora ya me tienen tan harta que cuando veo “número privado” descuelgo y cuelgo directamente. Y me quedo tan a gusto… Lo cierto es que el número de llamadas está descendiendo después de esta técnica así que de momento mientras no espere llamadas de hospitales o algo similar seguiré con ella.

Tengo que aclarar que cuando hablo de este tipo de comerciales me refiero a esos tan agresivos y maleducados, que también quede claro que hay gente muy amable y maja que se gana el pan de la misma manera la otro lado. Pero no me refiero a esos. Yo me refiero a los que te roban tu tiempo y te ponen de mala leche. Aunque hay que saber sacarle partido a todo y yo cuando tengo un día cruzado estoy deseando que llamen para discutir con ellos. Una vez le pegué una bronca a uno que me colgó él a mí jejeje. Cuando acabó su discursito empecé a echarle en cara que no tenía modales y que cuando uno llama a una casa lo primero que tiene que hacer es identificarse, decir su nombre y de qué compañía llama y luego preguntar si el posible cliente tiene un minuto para atender su llamada o llama en mal momento. Bueno eso y mil cosas, acabé diciéndole que no se trata de amedrentar a nadie para que no tenga escapatoria y no pueda decirte no y que si el producto fuera tan bueno no tendrían técnicas tan agresivas. Y no, por si lo estáis pensando, no me sentí culpable cuando terminé. El tío era un borde que iba de listo y no dejaba hablar a nadie, casi te exigía en lugar de explicarte así que me quedé más ancha que larga cuando le pegué la bronca. En fin, cada uno tiene sus trucos ¿Qué técnicas usáis vosotros para deshaceros de ellos? ¿Pensaís que los comerciales usan técnicas cada vez más agresivas? ¿Os molestan tanto como a mí las llamadas de “número privado”?

4 comentarios:

Dita Ciccone dijo...

holaaaaaaaaaaaa,pues yo siempre pienso que antes, con los fijos, ocurría lo mismo, no sabías quién te llamaba, no??? no me molesta mucho, casi me molestan más los 630303030303037878... esos números eternos, que el anónimo... Lo cojo si quiero, je, a veces aún reconociendo el número que llama, paso de cogerlo... es más, tengo siempre el teléfono en silencio para crispación de todos los que me llaman ochenta y tres millones de veces sin éxito...
Hasta la próxima!!!!! Petonets

Anónimo dijo...

Tremenda entrada.

xDDD

Odio ese tipo de llamadas. Por lo general, me río de ellos y les cuelgo, aunque tengo que reconocer que en una ocasión llamó un argentino, con el que en vez de hablar del adsl (que era su cometido) anduvimos flirteando xDD (fue una rara excepción)

También, cuando tengo un mal día, llamo a mi servicio de telefonía móvil y les critico por cualquier tontería. Es una buena terapia de relajación...
....al fin y al cabo, ellos también nos molestan... y ...en los momentos más inoportunos...

Anónimo dijo...

Yo directamente numero oculto o privado ya no lo cogo directamente. Son unos pesados. Además basta para que les digas que no, para que sigan y sigan acribillando con sus cosas. Comprendo que es su trabajo, pero es que son pesados hasta decir basta.

biquiños.

Anónimo dijo...

Somos dos; no sólo detesto ver en mi celular llamadas con ID privado, sino que odio los celulares, en general; tengo el mío porque la sociedad y su empeño de estar las 24 hr del día comunicados, me han obligado, pero de buena gana lo dejaría olvidado en algún lugar... y a veces lo hago.